Miro al horizonte y te veo,
miro este cielo estrellado
y vislumbro tu cara entre los astros de la noche.
Estás ahí,
en todas partes.
Aunque te creas lejana a esta vida,
no has dejado de perseguirme nunca.
Simpre vuelves a mi,
cuando estoy conmigo mismo.
Porque mi yo interior está diseñado a tu medida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario