martes, 23 de agosto de 2011

Las reglas para una vida mejor

Tras muchas reflexiones he llegado a la conclusión de que la vida no es tan fácil de vivir como creemos. Desde niños crecemos viviendo la vida sin analizarla. Quizás por esa razón es que tropezamos tantas veces.

Hoy, luego de muchas meditaciones, he decidido mostrarles algunos mis ideales para una vida mejor. No pretendo que las sigan, pues estos son mis preceptos, pero si me gustaría que algunas de mis ideas sirvan de ayuda a los demás.

Estas son algunas de ellas:


  • Ama tu vida sobre todas la cosas materiales: Tu vida es lo mas importante que tienes, pues sin ella no puedes disfrutar de las cosas materiales. Por eso debes preservarla cueste lo que cueste.

  • Escucha los consejos: Los consejos no se discuten, solamente se escuchan y se agradecen. No estas obligado a seguir los consejos de los demás, pero debes demostrar que te sientes agradecido de que otra persona se preocupe por ti y por tu vida.

  • No le temas  a la muerte: El temer a la muerte solo nos hace ser infelices. Sabemos que la vida es corta, y no queremos aceptar que debemos perderla. Pero la muerte es algo seguro; pues entonces, no nos preocupemos por ella. Que llegue cuando tenga que llegar.

  • Vive una vida placentera: Con esto NO me refiero a que tengas mucho sexo, sino a que todo lo que hagas lo hagas con amor, como si te gustara. No vivas malos ratos innecesarios, la vida es tan corta; disfrútala.

  • Sé amigable: Es bastante bueno tener muchos amigos, aunque con esto no quiero decir que todos tus amigos sean personas de confianza, sino que es bueno conocer a personas. Esto nos ayuda a vivir menos estresados y solitarios.

  • Selecciona minuciosamente a tus amigos de confianza: Tus amigos desempeñan un rol sumamente importante en tu vida, pues ellos influencian mucho en tus acciones. Por tal razón, debes saber elegir; estudiar cuidadosamente sus características y costumbres.

  • Mantén la idea de la existencia de Dios: Debes creer en Dios, pero no en un Dios malvado y castigador, sino en un Dios amoroso, piadoso, misericordioso, bueno y pacífico. Sea cual sea tu idea de Dios, debes mantenerte en paz con él.

  • Trata bien a todas la personas: Si, especialmente a las mujeres, pues ellas son el complemento para lograr la felicidad. Aunque esa felicidad no sea eterna, ellas llenan nuestras vidas de los más hermosos momentos; los más hermosos.

  • Ama a tus familiares:
     Quiere a los tuyos más que a los demás, pues tú le dueles a ellos. Cuando sientas ternura por ellos, no te contengas, demuéstraselo.

  • Escucha a todos:
    Todos merecen ser escuchados. No se pierde nada escuchando a alguien. Déjalos expresarse. En cuanto a las personas de confianza, ofréceles un oído amigo; alguien que los escuche y se preocupe por ellos. Ellos lo valoraran mucho, te lo aseguro.

  • Nunca grites: Aunque es posible discutir cordialmente, en ocasiones las personas, con el fin de hacer notar su punto de vista sobre un asunto, terminan gritando. Eso no es necesario; el valor de lo que dices no depende del tono de tu voz. Piensa que las más maravillosas locuciones de la vida — como declarar su amor  se hacen en voz baja y pacífica.

  • No creas en el destino: En especial, no lo culpes por tu errores y malas acciones. Tú y solo tú eres el único culpable de las consecuencias de tus acciones, y eres quien las puede mejorar. 

  • "Los libros me enseñaron a pensar y el pensamiento me hizo libre": Leer es primordial, pues a través de la lectura podemos conocer todo, y como dice la frase, ser libres. La lectura nos guía hacia la sabiduría, y para mi la sabiduría es libertad; es felicidad. 

  • Sé discreto: Aunque no debes cometer ninguna acción de la que puedas avergonzarte delante del público, debes ser discreto con tus hechos. No todos tienen que vivir tus felicidades, tus tristezas o alegrías. La discreción te hace más sabio, pues sabes algo que los demás no saben y eso te otorga poder sobre ellos.

  • Sé responsable: Has lo que tienes que hacer. No te dejes persuadir por los demás para que abandones tus responsabilidades, pues más adelante habrá ocasiones para hacer todo lo que quieras. Todo a su tiempo; si tienes que estudiar, estudia; si tienes que trabajar, trabaja; y si tienes que divertirte, pues diviértete.

  • Un hombre de palabra: Esa debe ser tu postura; mi palabra es inamovible. Esto, siempre que no atente contra tu vida y tu bienestar. Pero debes cumplir con lo prometido para que no tengas que estar jurando para que te crean. Debes ser una persona creíble, confiable; una persona de fiar. 

  • No jures: No es necesario; el que quiera creer lo que  dices, que lo crea; el que no, pues que no lo crea. Pero, como dijo Jesús, que tu SI sea SI y que tu NO sea NO.

  • Utiliza las palabras mágicas (por favor, permiso, buenas noches, buenos días, buenas tardes, excúseme, etc...): Estas te hacen lucir mucho más educado, y además, te harán sentir más feliz. 

  • No utilices frases despectivas: Especialmente esas que son vulgares (ese tipo/a, el/la viejo/a ese, etc...). Estas te hacen notar como un mal educado y como una mala persona. Mantente sereno en las discusiones porque la lengua es muy difícil de dominar.  

  • Respeta las opiniones ajenas: Aunque sean diferentes a las tuyas, también son válidas. Los demás tienen derecho a expresar sus ideas, y aun sean erróneas, no debemos hablar mal de ellas, sino tratar de encaminarlos a la verdad. 

  • Ayuda solo al que lo necesita: No pierdas el tiempo brindando tu ayuda a las personas que no la necesitan, pues no la valorarán. Ayuda al necesitado y te estará agradecido para siempre. 

  • No digas de los demás las cosas  que no puedes decir en presencia de ellos: Prívate de la libertad de criticar a los demás. Ellos tienen su vida y tienen el derecho a vivirla como deseen. No es tu responsabilidad cuidar de ellos o preocuparte por ellos. 

  • "Yo soy un ser especial; soy como soy, y no como alguien quiera que sea": Esa es mi postura; yo tengo mi personalidad y no tengo porque cambiarla por nadie. Soy como soy, y aun con mis defectos, soy feliz. 

Por último:

  • Vive: Si, vive; has todo lo que un ser humano debe hacer. Aunque claro, dentro de los límites. Aprende a disfrutar de las pequeñas y hermosas partes de la  vida. Ama, sufre, diviértete, baila, entrégate, llora, ríe; has todo lo que debes  hacer, ¡¡¡vive!!!.


Eso es todo, espero les halla gustado y obtengan de este texto el mejor provecho.

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