Usted

Usted es la dama de mis sueños. La que mi mente, es sus momentos de ocio, creó para animar mis soledades y mis tristezas. No sabia que cómo eras hasta que te vi. En ese momento supe eras tú, pero estabas comprometida y eso empañó mi poca clarividencia. Una clarividencia maltratada por todas las secuelas de aquellos sucesos pasados y, supuestamente, colocados en el tramo del olvido.

Nadie más que usted tiene el poder de construir o destruir mi vida. Aunque por eso tengo miedo de que construyas mis destrucción. Te quiero, pero te temo. Pues, en ocasiones me pregunto: Cuál es tu objetivo con todo esto? A caso solo quieres divertirte un poco? y luego que? Qué pasará? Qué será de mi, de ti, de nosotros? 

Quizás tú estarás felizmente casada y yo esté solo y sumido en la melancolía y el silencio negro de la oscuridad. Brillará alguna vez más el sol para mi? o estaré eternamente sumergido en la oscuridad, el frío y la soledad característicos de un sepulcro?

Ahora bien, y si existiera alguna posibilidad de que fueras mía? de que dejaras a tu dueño? De ser eso posible mi vida sería diferente. Por ejemplo, hoy no estaría tan preocupado, maltratado emocionalmente y sintiéndome el segundo de tu vida, tu fusil de reserva. Si fueras mía todo fuera diferente para los dos, si mi quisieras como quiero.

Sé que te imaginas como me siento los domingos. El día de toda la semana en que eres menos mía, en que sé que no puedo siquiera llamarte, en que está prohibido pensar en ti, aunque yo viole dicha regla mil veces.

Si alguien pudiera decirme, por qué te necesito tanto en mi vida? Al parecer sabes lo que tienes que hacer para tenerme pensando en ti el día entero. 

Quieres tú responder a todas estas preguntas, te invito a ser quien me ayude a aclarar este oscuro porvenir que rodea mis pensamientos del futuro.